- Durante las inspecciones, personal de la Profeco inmovilizó al menos una docena de instrumentos en distintas estaciones
Rafael Pascual
Este fin de semana varias gasolineras de Cancún amanecieron con sellos de clausura, resultado de una serie de operativos que sorprendieron tanto a usuarios como a empleados. Entre las estaciones afectadas se encuentra la Full Gas de la Región 105, sobre la Ruta 5, a la altura del fraccionamiento Tierra Maya, donde las autoridades detectaron múltiples anomalías en el suministro de combustible.

Durante las inspecciones, personal de la Profeco inmovilizó al menos una docena de instrumentos en distintas estaciones. En algunos casos hallaron fallas claras en el sistema, mientras que otros dispensadores presentaban bitácoras que no coincidían con los registros digitales, o baterías en mal estado, un detalle que podría facilitar manipulaciones en caso de cortes eléctricos y, con ello, afectar directamente al consumidor.
Los operativos no fueron aleatorios. Según Profeco, estas revisiones especiales se activaron a raíz de quejas ciudadanas y reportes previos que encendieron las alertas. Aunque la dependencia realiza verificaciones diarias en todo el país, este tipo de acciones interinstitucionales se define con base en indicadores de riesgo y estaciones con antecedentes cuestionables.
Los sellos de clausura fueron colocados por la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) en bombas y dispensadores, como medida de seguridad prevista en los artículos 170 y 170 Bis de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente. La advertencia es clara: quebrar esos sellos es un delito federal, sancionado conforme al Código Penal.
Las autoridades adelantaron que los operativos continuarán en diferentes puntos de la ciudad, mientras crece la expectativa entre usuario que por fin esperan mayor transparencia en un servicio donde los abusos han sido una queja recurrente.





