- La presidenta municipal resalta que la apicultura, una tradición histórica en el municipio, hoy avanza con el respaldo de su gobierno y del Estado, fortaleciendo a dos agrupaciones apícolas en Leona Vicario
Con una producción anual de tres toneladas de miel, la apicultura en Puerto Morelos ha demostrado ser una actividad resiliente y de gran potencial, incluso frente a retos como la sequía, que afecta la floración. Así lo afirmó la presidenta municipal Blanca Merari Tziu Muñoz, al subrayar que su gobierno tiene el firme compromiso de impulsar y consolidar esta tradición para convertirla en motor de bienestar para las familias portomorelenses.
“Hoy contamos con dos sociedades que reflejan la fuerza y diversidad de nuestra apicultura: una cooperativa que agrupa a ocho productores de abeja europea, y una agrupación privada conformada por cinco productores de melipona, la abeja nativa sin aguijón. Esta miel, por su calidad única y usos en repostería fina, medicina y cosmética, logra mejores precios en el mercado”, destacó la alcaldesa.
La alcaldesa recalcó que la apicultura no solo preserva nuestra identidad y nuestras raíces, sino que también abre oportunidades de ingreso digno, fortaleciendo la economía local y proyectando a Puerto Morelos hacia nuevos mercados nacionales e internacionales.
Por su parte, Ignacio Sánchez Herrera, director de Fomento Agropecuario, señaló que ambas agrupaciones apícolas de Leona Vicario cuentan con apoyos del Ayuntamiento y del Gobierno del Estado, que han otorgado colonias de abejas, apiarios y equipo especializado como guantes, velos y ahumadores. Asimismo, recordó que los ocho apicultores de la cooperativa forman parte de los 35 productores de la comunidad, quienes en conjunto generan hasta 15 toneladas de miel al año.
En tanto, Manuel Góngora Sansores, coordinador de Fomento Agropecuario y Pesquero, explicó que el reto inmediato es alcanzar una producción mínima de 20 toneladas anuales para acceder de manera más competitiva a la exportación. Sin embargo, destacó que ya se ha dado un paso firme con la obtención del distintivo “Hecho en Quintana Roo”, con el cual la cooperativa y la agrupación privada lograron ventas a Campeche, Yucatán, Tabasco e incluso concretaron una primera exportación a Canadá.
Finalmente, se anunció que en breve iniciará el proceso de renovación ante el Comité Estatal de Fomento de la Producción Pecuaria de la certificación de apiarios libres de varroa, indispensable