- Pese a que las direcciones municipales de Comercio en la Vía Pública y Protección Civil han reiterado que no se otorgarán permisos para la venta de pirotecnia por motivos de seguridad, la actividad persiste
Rafael Pascual
A pocos días de la celebración navideña, la venta de pirotecnia comienza a intensificarse en diversas zonas de alta afluencia del municipio de Benito Juárez, donde ya se observan varios puestos instalados durante la primera quincena de diciembre, a pesar de los riesgos que implica su comercialización y uso.
En los alrededores de supermercados se han detectado entre cinco y seis puestos de pirotecnia, mientras que en algunas tiendas de conveniencia operan hasta dos por punto, dependiendo de la zona. Esta situación ha generado inconformidad entre algunos ciudadanos que se oponen a la venta de fuegos artificiales dentro del municipio.
De acuerdo con la Dirección de Protección Civil, cada puesto debe cumplir con medidas mínimas de seguridad, como contar con un extinguidor, un botiquín de primeros auxilios, señalización visible de “prohibido fumar” y personal capacitado para actuar en caso de emergencia, además de los permisos correspondientes emitidos por la autoridad competente.
No obstante, la venta irregular continúa en plazas comerciales, tianguis y en las inmediaciones de tiendas de conveniencia, principalmente en la zona norte de la ciudad, según reveló un comerciante que solicitó el anonimato. Indicó que los principales puntos de venta se concentran sobre la avenida 20 de Noviembre, la zona de Lak’in y el tramo final de la avenida Nichupté.
En estos lugares los productos sin pólvora suelen exhibirse de manera visible, mientras que los artículos explosivos son ocultados en compartimentos especiales para evadir la supervisión. Los precios van de los 50 a los 500 pesos, siendo más costosos los de mayor potencia.
Pese a que las direcciones municipales de Comercio en la Vía Pública y Protección Civil han reiterado que no se otorgarán permisos para la venta de pirotecnia por motivos de seguridad, la actividad persiste. Esto se debe, en parte, a que la normativa federal permite la comercialización de menos de 10 kilogramos de material pirotécnico sin autorización especial, lo que dificulta su regulación a nivel local.
Al respecto, el director de Comercio y Servicios en la Vía Pública, José Gamaliel Canto Cambranis, informó que ya iniciaron los operativos de supervisión, aunque actualmente se realiza un censo de los puntos denunciados por la ciudadanía.
Señaló que a partir de la próxima semana se intensificarán las acciones en coordinación con Protección Civil y la Secretaría de Seguridad Ciudadana, para levantar actas, retirar a los vendedores y decomisar el producto, ya que no habrá permisos para su comercialización.
