- Sigue en espera de resolución a su denuncia por daños a vestigios arqueológicos causados por el Tren Maya
Luego de que representantes del gobierno federal reconocieron las afectaciones al patrimonio arqueológico y al medio ambiente por la construcción del Tren Maya, el investigador de la delegación del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Quintana Roo, Fernando Cortés de Brasdefer confirmó que siguen el acoso y el hostigamiento laboral en su contra mientras espera la resolución a su denuncia por los daños ocasionados a vestigios arqueológicos en la entidad.
A dos años de haber presentado la denuncia y la contradenuncia interpuesta por el INAH aún no he sido notificado de un dictamen, ya sea a favor o en contra, mientras tanto sigue el procedimiento interpuesto en mi contra ante el Órgano Interno de Control, explicó.
Comentó que el acoso y hostigamiento laboral en su contra continúan por parte de las autoridades del INAH en Quintana Roo “pero estamos aguantando y presentando las denuncias en forma académica con la esperanza de que haya cambios de autoridades locales de la dependencia federal por la complicidad en la que se han visto envueltos al avalar otros proyectos”.
En ese sentido, Cortés de Brasdefer puso como ejemplo la construcción de un parque de amenidades que se realiza en el denominado Parque Quintana Roo con piezas de sitios arqueológicos que fueron destruidos por la construcción del Tren Maya y que ha generado inconformidad y quejas.
Son piezas arqueológicas que se llevaron al parque para construir nuevas estructuras pero que no tienen un valor histórico ya que debieron ser reinstaladas en el lugar donde fueron extraídas, explicó.
Dijo que si bien son arqueólogos los responsables de los trabajos de ensamblaje hay contradicciones en cuanto a los supuestos permisos obtenidos que avalen dicho proceso.
Dicen que tienen los permisos, pero el mismo consejo de arqueología y el arqueólogo responsable han caído en contradicciones pues dicen que hay un permiso y otros reconocen que no hay tal aval, señaló.
Cortés de Brasdefer señaló que si bien hay denuncias presentadas por la afectación del patrimonio histórico por la destrucción de sitios arqueológicos “no hay confianza en las nuevas autoridades responsables de impartir justicia “porque finalmente nos dieron la razón de que sí hubo una afectación por la construcción del Tren Maya y siempre lo negaron. La SCJN es un verdadero desastre”.
Noticaribe / Rafael Briceño