La reducción de la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales, que el reparto de utilidades sea justo y los aguinaldos se eleven de 15 a 30 días, que se eliminen los impuestos a las prestaciones sociales y el respeto a los logros sindicales son algunos de los temas que exigieron este 1 de mayo, los afiliados a la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC).
Durante un mitin en la explanada de su central obrera en Playa del Carmen, Martín de la Cruz, secretario general de la CROC Quintana Roo, dijo que la clase trabajadora se mantiene firme en sus peticiones para mejorar la calidad de vida de los agremiados, porque el objetivo es que se mantenga la productividad de las empresas, pero con mejor salud mental y menor estrés.
“Las y los trabajadores tienen derecho de pasar más tiempo con su familia, por ello exigimos a los legisladores federales atender el tema de reducción de la jornada laboral”, acotó el líder Martín de la Cruz.
Categórico, apuntó que este Día del Trabajo no es un día de descanso, o solo para recordar; es un día para exigir a los gobiernos, pero sobre todo a las y los legisladores, tanto estatales como federales, que le cumplan a la gente que sí es productiva, a los que trabajan sin seguridad social, con salarios mínimos o en la informalidad, “la justicia laboral no es una dádiva, es una conquista de miles de trabajadores que desean ver la transformación es sus hogares, en sus comunidades”.
Dijo que al igual de su líder nacional, Isaías González Cuevas, seguirán luchando por trabajos dignos, “porque si nos quedamos callados, intentarán siempre gravar los ingresos, como el cobro de las comidas en los centros laborales”.
Ante miles de trabajadoras y trabajadores, el líder de la CROC en el estado llamó a la unidad de los trabajadores para que se fortalezca el sindicalismo, promoviendo un sindicalismo abierto, transparente y democrático.
Por su parte, el comisionado sindical de la CROC, Uri Carmona Islas, acotó que es el momento de fortalecer las organizaciones, de renovar la unidad y alzar la voz, donde otros guardan silencio, porque cada derecho conquistado puede ser arrebatado, “vamos por las cuarenta horas, por un aguinaldo justo y por las utilidades reales”.