Para el presidente de la Asociación de Hoteles de Tulum, David Ortiz, las restricciones derivadas del Parque del Jaguar han puesto en evidencia la carencia de accesos adecuados en la zona costera, una situación que refleja la falta de planeación con la que surgió el destino.
“Existen dos accesos, pero no están debidamente señalizados ni cuentan con la infraestructura básica que debería acompañarlos —baños, estacionamientos, iluminación, botes de basura, regaderas y elementos de seguridad—, todos indispensables para mejorar la imagen del destino y asegurar una experiencia ordenada para el visitante”, señaló.
“En los siete kilómetros de zona costera de Tulum es evidente la falta de accesos públicos adecuados. Quizá el primer paso sea rehabilitar y dotar de infraestructura los que ya existen. Esta infraestructura aporta sustentabilidad y seguridad al visitante, además de permitir la vigilancia necesaria para prevenir y controlar el ambulantaje en la zona costera.”
Reconoció que todas las playas son públicas, independientemente de que existan concesiones o de que estén bajo la administración de alguna instancia federal, como la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), tal es el caso del Parque Nacional Tulum, ahora integrado al Parque del Jaguar.
Ortiz Mena subrayó que este principio debe ser siempre garantizado, procurando al mismo tiempo que los accesos y la infraestructura asociada se desarrollen de manera ordenada, sustentable y segura, en beneficio tanto de los visitantes como de la comunidad local.
“El libre tránsito en las playas está garantizado; sin embargo, es necesario fortalecer los accesos, asegurando que cuenten con las condiciones adecuadas para los visitantes y que su desarrollo no demerite la imagen del destino. Si algo ha quedado claro es que todos compartimos el mismo objetivo: fortalecer el turismo, actividad de la que depende más del 90 % de la economía de Tulum.”
“La responsabilidad de proveer y habilitar los accesos públicos corresponde a los municipios, conforme a la normatividad vigente. El sector hotelero puede y debe ser un aliado en este proceso, colaborando para rehabilitar los accesos existentes y, con una adecuada planeación, establecer aquellos que sean necesarios, siempre garantizando el respeto al entorno y la experiencia del visitante”, puntualizó.
Ortiz Mena subrayó que Tulum requiere más accesos públicos a sus playas, no solo por la demanda de habitantes y visitantes, sino también por su utilidad para otras labores, como el retiro de sargazo.
Actualmente, visitantes y locales pueden ingresar a las playas de Tulum a través de las instalaciones de concesionarios privados; sin embargo, el líder hotelero consideró que la verdadera solución exige la participación activa de las instancias públicas.
En este sentido, Ortiz Mena recordó que el mercado nacional es el segundo más importante para el Caribe Mexicano, y por supuesto, para Tulum, representando cerca del 34% del total de visitantes que recibe la región.
“Además, durante el primer semestre de este año, el turismo interno mostró un crecimiento de 1.2% en comparación con 2024, lo que reafirma la relevancia del viajero mexicano para la estabilidad y desarrollo de nuestros destinos”, destacó.
Ortiz Mena también reconoció que “Tulum vende”, ya sea para bien o para mal, por lo que insistió en la importancia de trabajar para que la percepción del destino sea positiva, mostrando sus bellezas naturales y atendiendo las áreas de oportunidad detectadas.
Respecto al Parque del Jaguar, dijo confiar en que las autoridades federales mantendrán una actitud de apertura y flexibilidad para mejorar la accesibilidad y la imagen de este espacio emblemático.
Finalmente, ante los señalamientos de que Tulum ha perdido competitividad, el presidente de la Asociación de Hoteles local puntualizó que el destino sigue siendo aspiracional, con una imagen que muchos desearían tener, y con una oferta amplia y diversa.
“Tulum ofrece desde hostales de 20 dólares hasta hoteles catalogados entre los mejores del mundo, y desde opciones gastronómicas accesibles hasta restaurantes con mención en la Guía Michelin”, explicó.
En su oportunidad, la gobernadora del Estado, Mara Lezama Espinosa, aseguró que el estado se prepara para una temporada alta con grandes pronósticos en ocupación hotelera y llegada de turistas, impulsada por el Mundial 2026 y pidió no hacerse el ‘harakiri’ con campañas mediáticas en contra de los destinos turísticos, como Tulum