- Existe preocupación entre los habitantes y empresarios de Cancún, quienes demandan mayor presencia policial y acciones efectivas para frenar la violencia
Rafael Pascual
En medio de los festejos por el Día de Muertos la violencia volvió a hacerse presente en Cancún, con dos ataques registrados durante el fin de semana en distintos puntos de la ciudad.

El primero ocurrió la noche del viernes en la Región 92, donde un grupo armado atacó el bar La Oficina, recientemente reabierto tras varios incidentes previos.
En videos que circularon posteriormente, se observa a dos sujetos que llegaron a bordo de una motocicleta: uno de ellos se dirigió hacia un vehículo estacionado y arrojó un artefacto explosivo, mientras que el otro caminó hacia la entrada del bar y, al no encontrar a nadie, efectuó varios disparos contra la fachada del inmueble. Tras la agresión, ambos se retiraron del lugar sin ser detenidos, en medio de un clima de creciente impunidad.

Elementos de la Policía Municipal y del Ejército Mexicano acudieron al sitio y acordonaron la zona, mientras personal pericial de la Fiscalía General del Estado recolectó evidencias para determinar el tipo de artefacto utilizado. Este ataque reaviva la preocupación en la zona, ya que La Oficina ha sido blanco de hechos violentos en otras ocasiones, lo que mantiene bajo tensión a los residentes y negocios cercanos.

Horas más tarde, en la madrugada del sábado, se reportó otro incidente en el bar El Acuario, ubicado en la Supermanzana 221 sobre la avenida Niños Héroes. De acuerdo con las primeras versiones, personas no identificadas habrían rociado el inmueble con combustible antes de prenderle fuego y huir del lugar.
El Heroico Cuerpo de Bomberos acudió de inmediato, pero a pesar de los esfuerzos, el establecimiento fue declarado pérdida total. No se reportaron víctimas ni personas lesionadas.
Fuentes de seguridad indicaron que el siniestro podría estar relacionado con presuntos casos de extorsión o cobro de piso, una práctica que ha afectado a diversos comercios en la zona norte de Quintana Roo. Versiones extraoficiales señalan que el bar había recibido amenazas previas.
La Fiscalía General del Estado abrió una carpeta de investigación para esclarecer ambos ataques y determinar si existe relación entre ellos. Peritos y agentes ministeriales analizan las cámaras de seguridad cercanas y recaban información que permita identificar a los responsables.
Los hechos han generado preocupación entre los habitantes y empresarios de Cancún, quienes demandan mayor presencia policial y acciones efectivas para frenar la violencia que continúa afectando la vida nocturna y la seguridad en la ciudad.





