- La comunidad vive con miedo mientras la directiva guarda silencio ante un ataque que sacude al núcleo del ejido
Rafael Pascual
La violencia alcanzó el símbolo del poder comunal en Bonfil. La mañana de este lunes, una mujer identificada como Fabiola N. fue atacada a balazos dentro de la propia Casa Ejidal Luis Echeverría, dejando un rastro de sangre y temor entre los ejidatarios.
El ataque ocurrió a plena luz del día, cuando un hombre armado irrumpió en el edificio y disparó contra la víctima, hiriéndola al menos tres veces en el tórax. Testigos aseguran haber escuchado cinco detonaciones antes de ver al agresor huir corriendo.
Pese a la gravedad del hecho, ni la policía ni los servicios de emergencia llegaron con prontitud. Fueron particulares quienes trasladaron a la mujer a una clínica privada, y posteriormente trasladada al Hospital General, donde se reporta su estado de salud como delicado.
En el sitio del ataque, agentes de la Policía de Investigación localizaron tres casquillos percutidos y solicitaron acceso a las cámaras de seguridad, aunque hasta el momento no se han difundido detalles oficiales sobre los avances en la indagatoria. De forma preliminar, las autoridades consideraron el hecho como un intento de ejecución.
El atentado ha generado una ola de temor entre los ejidatarios, quienes denuncian la creciente inseguridad en la comunidad. No obstante, la actual directiva del ejido ha optado por el silencio, negándose a brindar información o emitir un pronunciamiento ante lo que consideran un hecho grave que no puede ser minimizado.
“Nos están matando y nadie dice nada”, expresó un comunero, quien pidió el anonimato por temor a represalias. “Si ya no estamos seguros ni en la Casa Ejidal, ¿qué nos espera allá afuera?”.
Mientras las autoridades guardan silencio y los agresores permanecen libres, la comunidad exige respuestas, protección y justicia.
