- “No podemos seguir permitiendo que se use la motocicleta como herramienta de impunidad. La Ley Chaleco permitiría identificar fácilmente a los operadores, y eso podría ser clave para prevenir y resolver crímenes. ¿Qué más tiene que pasar para que actúen?”, cuestionó el presidente del Observatorio Legislativo, Eduardo Galaviz
Rafael Pascual
Ante el aumento de hechos violentos vinculados al uso de motocicletas, el presidente del Observatorio Legislativo, Eduardo Galaviz Ibarra, reclamó la falta de voluntad de las autoridades para implementar la denominada “Ley Chaleco”, cuya aplicación —dijo— es ya urgente y necesaria para contener la inseguridad que aqueja a la ciudadanía.
Galaviz lamentó que pese a los reiterados llamados y a casos graves como el reciente asesinato del líder sindical Mario Machuca, las autoridades estatales no hayan tomado medidas concretas.
La responsabilidad recae, señaló, en la Secretaría de Gobierno —encabezada por Cristina Torres—, así como en el Instituto de Movilidad de Quintana Roo y la Secretaría de Seguridad Ciudadana del Estado.
“No podemos seguir permitiendo que se use la motocicleta como herramienta de impunidad. La Ley Chaleco permitiría identificar fácilmente a los operadores, y eso podría ser clave para prevenir y resolver crímenes. ¿Qué más tiene que pasar para que actúen?”, cuestionó.
Galaviz insistió en que la implementación de esta norma no debe seguir postergándose por presuntos actos de discriminación, como han señalado algunos clubes de motociclistas. “Estamos hablando de proteger vidas humanas. Lo mínimo que se espera es que los grupos organizados actúen con solidaridad ante esta situación tan grave”, expresó.
El presidente del Observatorio propuso alternativas para atender las inquietudes del sector motociclista, como el uso de chamarras identificables en lugar de chalecos, pero recalcó que los amparos pendientes no deben seguir siendo una excusa para mantener la inacción.
“Lo que no puede seguir es la apatía institucional. Asaltos, robos y homicidios cometidos desde motocicletas se repiten cada semana, y aun así no vemos acciones efectivas para frenar esta modalidad delictiva. La ciudadanía está cansada de la indiferencia”, advirtió.
Galaviz también hizo un llamado a reflexionar sobre el uso indebido de las motocicletas como transporte familiar. “No puede haber más de una persona a bordo cuando se cometen delitos con esa dinámica. La sociedad necesita medidas claras y responsables”.
Finalmente, urgió a las autoridades estatales a dejar de postergar la decisión y asumir su papel con responsabilidad. “La seguridad no puede seguir siendo rehén de la burocracia. Las instituciones deben actuar ya”, concluyó.