El restaurante, aledaño al Portal Maya y al muelle fiscal, llamado Dick & Willys, “privatizó” la playa al delimitar su área concesionada para uso y disfrute, impidiendo el libre acceso de bañistas locales, nacionales y extranjeros.
Con maderas y cuerdas, el personal de este restaurante acordonó la zona, incluida el área de acceso y salida a este establecimiento, conformado por una palapa que opera como restaurante-bar, con varias sombras de madera y zacate.
La Ley General de Bienes Nacionales (LGBN) establece además que el acceso a las playas y a la zona federal marítima contigua no puede ser inhibido, restringido, obstaculizado o condicionado.
Mediante varias denuncias anónimas, ciudadanos playenses exigieron a las autoridades responsables obligar al propietario del club de playa Dick & Willys a liberar el libre tránsito, cuyos letreros también restringen ingresar con alimentos y bebidas a la zona concesionada.
Este domingo al mediodía, acudieron al club de playa autoridades de la Zona Federal Marítimo Terrestre (Zofemat), encabezadas por Irving Lili Madrigal.
La intervención se realizó en seguimiento a las instrucciones de la presidenta municipal de Playa del Carmen, Estefanía Mercado, quien ha señalado que se trabaja para garantizar que todas las playas cuenten con acceso libre para habitantes y visitantes, en cumplimiento de la normatividad vigente.