- La gobernadora Mara Lezama destacó que el Janal Pixán es más que una fiesta: es una expresión de esperanza y continuidad. “Nuestras raíces nos dan fuerza —dijo—, y celebrar la vida a través de la memoria es la manera más hermosa de honrar a quienes amamos”
Rafael Pascual
Entre aromas de copal, velas encendidas y altares cubiertos de flores de cempasúchil, Cancún volvió a honrar a sus difuntos con el Janal Pixán 2025, una celebración que en apenas cuatro años, se ha convertido en una tradición para la ciudad. Más de 30 mil personas se reunieron en el primer día de actividades, y se espera que más de 75 mil visitantes participen a lo largo de los tres días de fiesta que concluirán el 3 de noviembre.

El andador principal de Puerto Juárez se transformó en un corredor de vida y memoria: 51 altares recordaron a los que ya partieron, 50 stands gastronómicos ofrecieron los sabores ancestrales del pueblo maya y 120 artesanos y emprendedores compartieron el arte que nace de sus manos y su historia.

La música, la danza y el teatro llenaron el ambiente de energía y color. La representación “Puerto de los Suspiros”, interpretada por la Compañía Municipal de Danza, Coro y Teatro de Benito Juárez, se llevó una de las ovaciones más cálidas de la noche, al evocar con fuerza poética el vínculo entre el pasado y el presente.
Pero fue la procesión marítima de las ánimas la que robó el aliento: 45 Catrinas navegaron sobre el mar iluminado por cientos de velas, en un espectáculo que unió la espiritualidad con la belleza del Caribe. El reflejo del fuego sobre el agua pareció dar vida, por un instante, a las almas que los vivos salieron a recibir.

El espíritu del Janal Pixán también se extendió por toda la ciudad. En el Parque de las Palapas, la tradicional “Cena de Ánimas” reunió a familias enteras en torno a la comida, la música y el recuerdo; mientras tanto, el panteón Los Olivos permaneció abierto las 24 horas, para quienes prefirieron honrar a sus seres queridos desde la quietud de las tumbas.
Entre el bullicio y la emoción, la gobernadora Mara Lezama Espinosa, acompañada por Verónica Lezama Espinosa y la presidenta municipal Ana Paty Peralta, destacó que el Janal Pixán es más que una fiesta: es una expresión de esperanza y continuidad. “Nuestras raíces nos dan fuerza —dijo—, y celebrar la vida a través de la memoria es la manera más hermosa de honrar a quienes amamos.”
Aunque el evento principal concluirá este domingo, las actividades culturales continuarán un día más, aprovechando que no hay clases en ningún nivel educativo, para que las familias sigan disfrutando de la música, la danza, la gastronomía y el arte popular que hacen del Janal Pixán una tradición única en Cancún.





