- “Si hacen paro, que no reciban sueldo. Los niños no deben salir afectados”, expresó una madre de familia, reflejando el descontento generalizado
Rafael Pascual
A partir de este miércoles 21 de mayo, los maestros de Benito Juárez se sumarán a un paro laboral convocado por el Comité de Lucha, como parte de un movimiento nacional contra la Ley del ISSSTE de 2007.
Durante la jornada, se realizará una “Marcha de Luz” y otras protestas, además de solicitar una cooperación de 200 pesos para financiar su participación en la lucha.
La respuesta de los padres de familia ha sido de creciente molestia. Muchos consideran que, si bien los maestros luchan por sus derechos, los que terminan pagando el precio son los estudiantes, quienes se ven privados de clases, mientras los docentes siguen recibiendo sus salarios completos. “Si hacen paro, que no reciban sueldo. Los niños no deben salir afectados”, expresó una madre de familia, reflejando el descontento generalizado.
Este paro, además de afectar la educación, ha levantado críticas sobre la gestión de los maestros, algunos de los cuales ya no parecen cumplir con una verdadera vocación educativa, sino más bien con un enfoque financiero. “Buscar docentes con valores, vocación y no solo intereses económicos”, sugirió un padre preocupado.
En resumen, el paro refleja una vez más el conflicto entre las demandas laborales de los maestros y las necesidades educativas de los estudiantes, dejando a la comunidad educativa atrapada en una difícil situación.