- Las comisiones de Planeación Municipal, Obras y Servicios Públicos, Desarrollo Urbano, Movilidad y Hacienda sostendrán una reunión para definir criterios sobre la regularización y posible expropiación de vialidades. Asimismo, la Secretaría de Ecología y Desarrollo Urbano condicionará la entrega de nuevos permisos a las empresas que no hayan cumplido con la entrega de sus fraccionamientos, para evitar que este problema se repita
Rafael Pascual
Alrededor de 8 mil lotes en 15 fraccionamientos del municipio permanecen en rezago debido a que los desarrolladores nunca concluyeron su entrega formal al Ayuntamiento, dejando a miles de familias sin acceso pleno a los servicios públicos. Ante esta situación, el gobierno municipal analiza la expropiación de vialidades como mecanismo para recuperar el control de estas zonas y permitir la inversión pública.
El regidor Samuel Mollinedo, de la Comisión de Desarrollo Urbano y Movilidad, señaló que los fraccionamientos afectados fueron abandonados por empresas que desaparecieron, se declararon en quiebra o simplemente incumplieron sus obligaciones legales. Esto mantiene las calles en un limbo jurídico que impide al municipio realizar obras de alumbrado, pavimentación y mantenimiento urbano.
“Tenemos claros casos como Paseos del Sol, Urbi o Quetzales. El Instituto de Regulación y Bienestar está trabajando mesas técnicas con la Consejería Jurídica para ver la manera de expropiar estas vialidades y que pasen a dominio municipal”, explicó Mollinedo. Añadió que al haber desarrolladoras que ya no existen, es prácticamente imposible que reclamen algún pago por la expropiación.
La reforma a la Ley de Expropiación estatal, realizada hace dos años, otorga a los municipios un camino jurídico más claro para intervenir en zonas que llevan décadas estancadas por negligencia empresarial. Actualmente, entre 60 y 70 desarrollos están en proceso de municipalización, 28 de los cuales ya concluyeron el trámite. Uno de los casos más representativos es Quetzales, entregado hace 20 años mediante un acta de entrega-recepción, pero sin escrituras de calles, debido a que la normativa de entonces no lo exigía.
El regidor recordó que incluso avenidas emblemáticas como Kabah, Bonampak, Cobá, Xcaret y 20 de Noviembre carecen de escrituras, pese a recibir inversión pública durante años. “Durante años fue fácil decir que no se podía intervenir porque no estaban municipalizadas, pero esa omisión inicial fue de los desarrolladores y quienes pagan las consecuencias son los ciudadanos”, afirmó.
Antes de que termine el año, las comisiones de Planeación Municipal, Obras y Servicios Públicos, Desarrollo Urbano, Movilidad y Hacienda sostendrán una reunión para definir criterios sobre la regularización y posible expropiación de vialidades. Asimismo, la Secretaría de Ecología y Desarrollo Urbano condicionará la entrega de nuevos permisos a las empresas que no hayan cumplido con la entrega de sus fraccionamientos, para evitar que este rezago se repita.
