Despliegan a 1,700 agentes tras saqueos a comercios; GN asume control en Acapulco

por Redaccion
147 Visto
  • Luego de la rapiña contra comercios de todo tipo en Acapulco, derivado del caos que dejó el impacto del huracán “Otis”, la Guardia Nacional desplegó a mil 700 elementos para vigilar el puerto y otros municipios de Guerrero

Los trabajos para el restablecimiento del orden público son apoyados con 20 patrullas pick up, 30 autopatrullas, 15 motocicletas y un helicóptero, reportó la Vocería de la corporación federal.

Los guardias nacionales implementaron dispositivos de seguridad en inmediaciones de plazas comerciales y mercados públicos, labor que realizan junto con la recuperación de las vialidades, retiro de escombros y lodo en calles y viviendas, además de repartir víveres a la población afectada.

Los agentes hacen recorridos de reconocimiento en poblados y colonias de los municipios de Coyuca, Atoyac, Ajuchitlán, Benito Juárez, Tecpan y Petatlán.

En tanto, la Secretaría de la Defensa Nacional tomó el control sobre la ayuda, pública y privada, que es enviada al puerto de Acapulco.

Acapulco sufre saqueos y falta de información

Enlazado a la conferencia matutina de Palacio Nacional, Luis Cresencio Sandoval, titular de la Sedena, explicó que los insumos donados por gobiernos, empresas y organizaciones sociales serán concentrados en la 35 Zona Militar, en Chilpancingo, desde donde vehículos del Ejército los distribuirán en donde se requieran.

El puente aéreo entre Acapulco y la Ciudad de México quedó habilitado ayer y servirá tanto para llevar ayuda humanitaria, como para evacuar a turistas.

Ejército distribuirá ayuda humanitaria

La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) tomó el control sobre la ayuda pública y privada que es enviada al puerto de Acapulco, tras la devastación del huracán “Otis” que dejó -hasta el momento- 27 muertos, de acuerdo con autoridades federales, tras su impacto en categoría 5 en la Costa Grande de Guerrero.

El general Luis Cresencio Sandoval informó que los víveres y demás productos sólo podrán entrar a la zona siniestrada en vehículos del Ejército.

Explicó que, para ello, toda la ayuda que aporten particulares, gobiernos estatales, organizaciones civiles e iniciativa privada será recibida en un centro de acopio instalado en Chilpancingo.

En ese lugar, instalado en la 35 Zona Militar, alimentos, medicamentos, agua, mantas y demás objetos serán “reorganizados” para cargarse en los camiones militares.

Ahí estaremos recibiendo la ayuda de la población en general, de los gobiernos de los estados, de la iniciativa privada, de otras organizaciones que quieran colaborar con ese apoyo”, dijo.

El Ejército se encargará de concentrarla, clasificarla, empacarla y llevarla al puerto, esto, con el fin de que se eviten aglomeraciones de autos en Acapulco.

Pedimos a la población que no se acerque hacia acá para no generar una aglomeración en el tránsito”, dijo Sandoval.

Expuso que la circulación en la autopista de Chilpancingo a Acapulco ya se encuentra en operación y gracias a ello se estableció un programa de salida con autobuses de turistas o de habitantes de Acapulco que quieran salir del puerto.

El día de ayer hubo 150 autobuses que realizaron esta actividad. Como estrategia se establecieron dos puntos fuera de la ciudad de Acapulco que nos permitieran no llenar, no saturar las avenidas, en la iglesia de Costa Azul y La Venta. Hoy (ayer) estarán 120 autobuses adicionales para realizar esta actividad”, explicó el funcionario.

Escasean en Acapulco agua y alimentos; ordeñan gasolina

Tras el aumento de la rapiña y el inicio de robos en casas de la periferia, el Ejército y la Guardia Nacional tomaron el control de la seguridad en diversas zonas de Acapulco, principalmente sobre la Costera Miguel Alemán, la más emblemática del puerto.

Sin embargo, en las colonias de la periferia la situación se agrava porque la población se queja de la falta de agua, comida y apoyo por parte de las autoridades.

Se ha constatado que centenares de personas se aglomeran en las gasolinerías inoperantes para extraer el combustible, como si fueran huachicoleros, quienes a pesar del riesgo, hacen largas filas por unos litros de combustible sin importar que pueda ocurrir una tragedia, como sucedió en Tlahuelilpan, Hidalgo, en 2019.

En tanto, muchas personas caminan sobre la costera buscando comida en los establecimientos saqueados y, algunos, a sus familiares.

Desde el poblado de La Venta hasta Pie de Cuesta la fuerza de “Otis” fue implacable. De punta a punta se reproduce casi nítida la misma imagen: desolación, desesperación y destrucción.

A más de 48 horas del paso de “Otis” comienza la escasez de alimentos y agua y, con ella, la desesperación. Todos los supermercados, Oxxos, farmacias y tiendas de conveniencia están vacíos. Hasta ayer no se han habilitado comedores comunitarios, tampoco se ha informado sobre el reparto de ayuda humanitaria.      El Independiente/Redacción     Foto: Cortesía Reuters

You may also like